El artificio de la escritura / The artifice of writing


martes, 23 de febrero de 2010

Fobia digital

No deja uno nunca de aprender y olvidar, más aun si se trata del internet. Para alguien que se formó en la hoy casi inconcbible era de la precomputación, las capacidades y funciones del computador y de la red resultan pasmosamente complicadas e idescifrables. Hasta que no se le pierde el miedo al aparato y a todo a lo que con él se accede, el uso del computador es motivo de nerviosismos, tensiones y, lo que es peor, frustrantes pataletas de impotencia. Darse cuenta de las posibilidades infinitas que la tecnología ofrece y no poder hacer uso de ellas, a causa de ese pavor de crear un caos inextricable al apretar la tecla equivocada u optar por la selección inadecuada, crea un deprimente sentido de incompetencia que aumenta en la medida que aumentan las nuevas oportunidades y opciones tecnológicas. Al cabo de tanto errar y tanto vacilar se produce la fobia digital, el temor insuperable a enfrentarse a la coruscante pantalla y su teclado, consola de comando de una nave lanzada al vacío.

Todo está en tratar de usar lo que el sistema ofrece, no siempre con perfecta claridad para el que no se atreve todavía a navegar arriesgadamente. Pero el afectado de esa fobia incontrolable ni tratar puede. Y en su limitación se duele de un mal que no parece tener remedio.

Algo se logra, a pesar de todo, si poco a poco el temeroso se arriesga y se vuelve temerario al punto de atreverse a dar pasos en direcciones desconocidas. Por lo general, o más bien siempre, el riesgo es mínimo y los resultados dan máxima satisfacción. Maravilla de la maravilla, la tecnología cumple, cada vez mejor, sus objetivos y el anticuado esgrimidor de plumas y portador de papeles se siente trasportado a una realidad que jamás creó posible, aunque soñara en sus días de engorrosa maquinilla de escribir mecánica con la entonces inverosímil máquina que escribiera sola.

No escribe por sí mismo el computador, pero no está lejos de hacerlo en cuanto facilita enormemente el esfuerzo de escribir y completar un texto publicable. Y el blog ofrece una inmediatez de comunicación que no se tenía antes. Inmediatez que relaja el estilo y hace del escribir un acto casi natural, como el conversar o el tanto más natural hablar a solas. Si solo la fobial digital no estuviera en medio complicando las cosas.

domingo, 7 de febrero de 2010

Garabatear ::::: Doodling

Como el niño que descubre maravillado la línea que la crayola marca en la pared hasta ese instante en blanco--o de un mate gris perla o un verde agua--y no puede ya dejar de rayarlo todo, así los mayores que sufren la tortura de largas reuniones e interminables peroratas se entretienen, fascinados de su magia, con las líneas que el lápiz ocioso en la mano dibuja en el papel dispuesto a las notas que se esperó tomar y no hay quien tome. La mano que se aburre, actúa por si sola: el garabato se va desarrollando solo, como un signo secreto, indescifrable, de lo inane: ojo de la cerradura de un portón que ha de abrirse a lo otro, a lo que se ha querido siempre sin saber bien en qué consiste. La línea del garabato, la marca del lápiz en el papel, va cerrando el símbolo espontáneo de lo que no se sabe pero se imagina y se desea. Garabato de la impaciencia controlada, línea del nervio enroscado sobre sí mismo, cola enredada del dragón: figura caprichosa del hastío que se sobrelleva apenas.

sábado, 6 de febrero de 2010

Dos en uno +++ Two in One

Una cosa es lo que uno dice y escribe y otra lo que uno hace. Son dos mundos diferentes el de la acción y el de la palabra; o podría decirse que hay dos personas en uno mismo: la que se sienta al escritorio, enciende el computador y teclea; y la que le dicta a ésta lo que escriba. En este momento soy esas dos personas un tanto contradictorias.


One thing is what one says and writes, and quite another what one writes. The world of action and the world of writing are two different worlds; or one could say that there are two persons in oneself: the one who sits at the desk, turns on the computer and types; and the one who dictates what the other types. At this moment I am both, slightly contradictotry, persons.

miércoles, 3 de febrero de 2010

El don de la escritura ooo The Writer's Gift

El arte de la escritura es en algunos un don; en otros --la vasta mayoría--un imposible. El artificio de escribir ya es otra cosa, porque son infinidad los prestidigitadores de la palabra: cuasi artistas de circo y vaudeville. Vaudeville y circo de la literatura al día, qué digo: al momento.

The art of writing is for some people a gift; for others --the vast majority of people-- it is an impossibility. The artifice of writing, though, is quite another thing. They are too many the word trickers, almost artists of the circus and the vaudeville. Vaudeville and circus of the literature of the day--what am I saying?--of the moment.